Mujeres excelentes

Las cosas que Julian podría hacer parecían no tener fin, desde casarse precipitada e inconvenientemente y abandonar por completo la Iglesia, hasta marcharse a Roma y acabar de cardenal

Se dice que el sufrimiento purifica y ennoblece a las personas, y es cierto que tal cosa ocurre a veces, pero ¿aprendería Helena a ser más limpia en la cocina, o llegaría Rocky a compartir su interés por los grupos de parentesco matrilineales?

Deduje que se habían «convertido» en Italia, que parecía el lugar más indicado para cambiar de bando religioso si se tenía la intención de hacerlo

Creo que quizá todo el mundo pone secretamente el vino junto al fuego —dije

A veces hay un placer considerable en el vicio secreto

¿Valía algún hombre esta servidumbre? Probablemente no, pero una lo apechugaba valiente y animosamente y al final podía resultar que después de todo no era tan pesado.

—¿Pero no hay gente que se dedica a hacer esas cosas? —pregunté.
—¿Quiere decir mujeres excelentes a las que uno respeta y estima?

—. ¡Qué maldades hacen los hombres, no dejarle nada para la vejez, ni siquiera la antropología!

Usted se pone demasiado en el lugar de los demás —dijo Helena—. Yo creo que es totalmente feliz cuidando los tiestos de su jardín y leyendo novelas. El secreto está en ser feliz e independiente

Sabría usted qué hacer con la libertad y la independencia si llegaran tan tarde en la vida?