La muerte del censor
Una turbia trama de odios ocultos y pasiones escondidas abre una trepidante serie de intriga policial ambientada en la Barcelona de los años sesenta, en pleno franquismo. El protagonista es el comisario Hilario Soler, oveja negra entre sus compañeros por sus escrúpulos de conciencia y su celo ejemplar. Veintisiete puñaladas y cuatro balas, una cruel venganza. Cuando aparece el cadáver de uno de los más importantes censores del régimen se encienden todas las alarmas del Estado. El caso se encargará a Soler, el mejor hombre de la comisaría. Pero ¿es esa la investigación más adecuada para encargar a alguien con escrúpulos?
Filo de sable
Ejecutado. En medio de la calle. Un charco de sangre en el suelo y un agujero de bala en la nuca. Pero la policía no encuentra ningún casquillo, es obra de un profesional. Hilario Soler, el investigador insobornable, el hombre honesto que incomoda superiores y compañeros, se encarga del caso: la víctima era el chófer de uno de los generales retirados más destacados del régimen. Prueba a prueba, indicio a indicio, una terrible sospecha se abrirá paso ante los ojos incrédulos de los investigadores. Una sospecha tan insoslayable como peligrosa y repulsiva.Al otro lado del infierno
Sangre, cinismo, pecado y perdón. El nuevo caso del investigador Soler hará tambalear uno de los pilares del régimen: la Iglesia. La tercera investigación de nuestro detective tiene como detonante el terrible asesinato de la hermana María, una monja que ayudaba en los partos en un hospital, pero que escondía en su celda utensilios de tortura y flagelación… ¿Hay pecados que ni siquiera Dios es capaz de perdonar? Un caso estremecedor que nos sumerge, de la manera más grotesca y abominable, en las cloacas de la sociedad de la época, donde el dinero puede con todo: con las personas, con las creencias y con el más allá.