es
Kitaplar
Jeffrey Eugenides

Middlesex

  • Melisa Pealıntı yaptı3 yıl önce
    Y como no decía una palabra sobre sus problemas, la barba empezó a expresar en silencio todo lo que él callaba.
  • Vintage Autumnalıntı yaptı3 yıl önce
    Al envejecer cuesta trabajo subir las escaleras, entra uno en el cuerpo de su padre. Desde ahí sólo hay un breve salto hasta los abuelos y entonces, antes de que uno se dé cuenta, se empieza a viajar en el tiempo. En esta vida crecemos hacia atrás.
  • Vintage Autumnalıntı yaptı3 yıl önce
    Según mi experiencia, las emociones no pueden describirse con una sola palabra. «Tristeza», «alegría», «remordimiento», esos términos no me dicen nada. La mejor prueba de que el lenguaje es patriarcal quizá sea que simplifica demasiado los sentimientos. Me gustaría tener a mi disposición emociones híbridas, complejas, construcciones germánicas encadenadas, como «la felicidad presente en la desgracia».
  • Tania Villanuevaalıntı yaptı9 ay önce
    No estoy seguro de que, con una abuela como la mía, pueda llegarse alguna vez a ser un verdadero norteamericano en el sentido de creer que la vida es una búsqueda de la felicidad. La enseñanza que podía extraerse del sufrimiento y el rechazo de la vida de Desdémona era que la vejez no proseguía los múltiples placeres de la juventud sino que era una larga prueba que poco a poco iba robando intensidad a las más pequeñas y sencillas alegrías. Todo el mundo lucha contra la desesperación, pero lo que siempre triunfa al final es eso. Tiene que triunfar. Es lo que nos permite decir adiós
  • Tania Villanuevaalıntı yaptı9 ay önce
    Volver a Detroit desde climas cálidos siempre es un hecho deprimente. Pero entonces lo acogí con agrado. Aquellas zonas urbanas abandonadas aliviaron el dolor por la muerte de mi padre, haciéndolo partícipe del estado general de las cosas. Al menos la ciudad no se mofaba de mi dolor mostrando un aspecto deslumbrante o encantador
  • Tania Villanuevaalıntı yaptı9 ay önce
    Mi madre solía decir que nunca le habían cortado completamente el cordón umbilical que la unía a sus hijos. En cuanto el doctor Philobosian cortó físicamente el cordón, otro vínculo espiritual había ocupado su sitio.
  • Tania Villanuevaalıntı yaptı9 ay önce
    En aquella época comprendí lo que estaba dejando atrás: la solidaridad de una biología compartida. Las mujeres saben lo que significa tener un cuerpo. Entienden sus dificultades y flaquezas, su esplendor y sus placeres. Los hombres piensan que sus cuerpos son sólo suyos. Los cuidan en privado, y hasta en público.
  • Tania Villanuevaalıntı yaptı9 ay önce
    Me había equivocado con Luce. Yo contaba con que, después de hablar conmigo, decidiría que era normal y me dejaría en paz. Pero empezaba a entender algo de la normalidad. La normalidad no era normal. No podía serlo. Si la normalidad fuese normal, nadie se preocuparía de ella. El mundo podía quedarse tranquilo y dejar que la normalidad se manifestase por sí misma. Pero la gente tenía dudas sobre la normalidad, y sobre todo los médicos, que no estaban seguros de que se manifestara como era debido. De modo que se sentían inclinados a corregirla
  • Tania Villanuevaalıntı yaptı9 ay önce
    Pero al final no fue cosa mía. Las cosas verdaderamente importantes nunca son cosa del individuo. Me refiero al nacimiento, a la muerte. Y al amor. Y a lo que el amor nos lega antes de nacer
  • Tania Villanuevaalıntı yaptı9 ay önce
    Eso hacen los chicos y los hombres para anunciar sus intenciones. Se te ponen encima como la tapa de un sarcófago. Y lo llaman amor
fb2epub
Dosyalarınızı sürükleyin ve bırakın (bir kerede en fazla 5 tane)