El club de los eternos 27 (Spanish Edition)

«Si mi sonrisa mostrara el fondo de mi alma, mucha gente al verme sonreír lloraría conmigo».

KURT COBAIN

Tú no eres de esos. Tú no le robas el corazón a la gente, tú les recuerdas que lo tienen.

La piel se le puso de gallina y noté un pinchazo en el pecho al saber que ese era el efecto que tenía en ella.

Dicen que todas las personas tenemos un lugar en el mundo. Nuestro espacio. El sitio en el que alcanzamos la paz. Al que pertenecemos y que nos pertenece. Yo lo encontré esa noche. Estaba allí, con mi mejilla sintiendo su carne de gallina, la nariz aspirando su olor y los ojos cerrados. Mi casa sin muros. Mi universo en el que volar.

Da igual que te escondas, siempre te encuentro.

porque los deseos que más importan son los que nunca se pronuncian en voz alta y, aun así, alguien te los concede.

Nada me apetecía más en el mundo que conocer el sabor de su risa.

Pocas personas lo saben, pero a veces solo hace falta que una persona crea que eres único para que tú también te veas así. El efecto contagioso de la opinión ajena.

Cada vez que lo hacía descubría distintos matices, como si durante años hubiese almacenado sonrisas y cada día me regalase una diferente.

El rosa se convirtió en mi color favorito. Significaba amistad. Era la sonrisa del grandullón.