más orillas que río”. Briúsov era pura orilla, y de granito. La orilla ciudadana de granito,
Talia Garzaalıntı yaptı5 ay önce
Un Maestro, ¡y semejante falla! Sí, porque la maestría no es todo. Se necesita un oído. Briúsov no lo tenía. La antimusicalidad de Briúsov, a pesar de la externa (local) musicalidad de toda una cantidad de poemas – su esencia antimusical era la sequía, la ausencia del río
Talia Garzaalıntı yaptı5 ay önce
palabra “interesante” en una de sus páginas más patéticas, una palabra del mercado y de la tasación, impensable ni
Talia Garzaalıntı yaptı5 ay önce
Preguntarás, quién ordena que el agosto sea vasto, a quien nada le parece chato, quién se dedica al adorno de una simple hoja de arce, y desde los días del Eclesiastés no abandona su puesto
Talia Garzaalıntı yaptı5 ay önce
¿Salvia? Sí, señores, salvia. El poeta es como Dios, como niño, como mendigo, no desprecia nada. ¿Y no sería ello – de Dios, de niño, de mendigo – este espanto?:
Talia Garzaalıntı yaptı5 ay önce
Luego el comienzo del poema “Noche sofocante”, uno de los más extraordinarios de todo el libro:
Talia Garzaalıntı yaptı5 ay önce
La gota tiene el peso de un gemelo, y el jardín enceguece como un meandro, Todo salpicado, y goteando millones de lágrimas azules.
Talia Garzaalıntı yaptı5 ay önce
Se convence de que todo está desierto, vuelve a lo de antes – corre por las estrías del techo, tras las canaletas y las atraviesa...
Talia Garzaalıntı yaptı5 ay önce
amó a Pasternak: la lluvia. (¡Cómo le ha llovido al Poeta! – ¡Todo el libro flota!) ¡Pero qué poco otoñal, qué poco mezquino, qué poco llovizna – ¡la lluvia! ¡Una lluvia-guerrero, y no una lloviznita!
Talia Garzaalıntı yaptı5 ay önce
cómo a los vulgares huevos de rana, los llaman, disfrazándolo, caviar prensado.