A principios de los años setenta, muchos chilenos se sorprendieron con la historia nacional, al escuchar la Cantata de Santa María de Iquique. Narraba una historia olvidada y cumplió más tarde un papel en cierto modo profético. Era Chile un país tan largo y mil cosas podían pasar. Y pasaron. Este libro se remonta a la etapa anterior a la masacre y culmina con ella. Es decir, narra la historia de los orígenes del movimiento popular en Chile, desde la Sociedad de la Igualdad, de 1850, hasta los tiempos de la “cuestión social” a principios del siglo XX. Esta última se propone verla en su doble manifestación, como el deterioro de las condiciones de vida del pueblo en las ciudades y en las minas, así como la emergencia de la protesta social, que recorrió un primer ciclo de movilizaciones populares, desde la huelga portuaria de Valparaíso en 1903 hasta la masacre de la Escuela Santa María de Iquique, en 1907.