La mayor parte de los problemas, creo yo, surgen por expresarse con poca claridad. Y estoy convencido de que la mayoría de la gente habla de manera ambigua porque, en su fuero interno, busca problemas
metztlilunitaalıntı yaptı8 ay önce
Pues que uno no tiene elección. No puede elegir a su gusto. Se parece a una inundación, a un alud o a un terremoto. Nadie sabe cuándo se producirá, y en el momento en que ocurre no caben objeciones.
metztlilunitaalıntı yaptı9 ay önce
—La evolución es así. La evolución siempre es despiadada, y triste. No existe una evolución alegre
metztlilunitaalıntı yaptı9 ay önce
Ella me había dicho: «Si has venido en busca de paz...».
Pero yo no podía jurar eso.
Cuando las negras tinieblas cayeron sobre la ciudad y empezaron a encenderse las farolas que se sucedían en el camino que bordeaba el río, me dirigí hacia la Colina del Oeste por las calles desiertas.
metztlilunitaalıntı yaptı9 ay önce
Ella me había dicho: «Si has venido en busca de paz...».
Pero yo no podía jurar eso.
metztlilunitaalıntı yaptı9 ay önce
. Y si, por una razón u otra, estas vivencias no se han borrado de nuestra memoria y vivimos ignorándolas. ¿No lo has pensado nunca?
—Nunca —dijo ella—, Pero es posible que se te ocurran estas cosas porque eres el lector de sueños. El lector de sueños piensa y siente de una manera muy distinta a los demás.
metztlilunitaalıntı yaptı9 ay önce
A partir de ahora, te llamarás «el lector de sueños». Ya no tendrás otro nombre. Tú serás «el lector de sueños», igual que yo soy «el guardián». ¿Comprendido?
metztlilunitaalıntı yaptı9 ay önce
—¿«Viejos sueños»? —solté sin pensar—, ¿Y eso qué es?
—Los viejos sueños son... viejos sueños. En la biblioteca los hay a montones. Tú coge tantos como quieras y léelos con calma.
metztlilunitaalıntı yaptı9 ay önce
Eso equivaldría a cruzar el desierto sin brújula. Moisés lo logró, pero...
—Moisés logró incluso atravesar el mar.
—De eso hace ya mucho tiempo
metztlilunitaalıntı yaptı9 ay önce
Me habían abandonado, sin preparación mental alguna, en la oscuridad más absoluta: no era de extrañar que, de repente, experimentara una enorme lasitud.