es
Mariano Azuela

Los De Abajo

Kitap eklendiğinde bana bildir
Bu kitabı okumak için Bookmate’e EPUB ya da FB2 dosyası yükleyin. Bir kitabı nasıl yüklerim?
  • Marlenealıntı yaptı4 yıl önce
    ¡Qué hermosa es la revolución, aun en su misma barbarie!
  • Marlenealıntı yaptı4 yıl önce
    Somos elementos de un gran movimiento social que tiene que concluir por el engrandecimiento de nuestra patria. Somos instrumentos del des-tino para la reivindicación de los sagrados derechos del pueblo. No peleamos por derrocar a un asesino miserable, sino contra la tiranía misma. Eso es lo que se llama luchar por principios, tener ideales.
  • Marlenealıntı yaptı4 yıl önce
    perseguidos por estos condenados del gobierno, que nos han declarado guerra a muerte a todos los pobres; que nos roban nuestros puercos, nuestras gallinas y hasta el maicito que tenemos para comer; que queman nuestras casas y se llevan nuestras mujeres, y que, por fin, donde dan con uno, allí lo acaban como si fuera perro del mal.
  • Marlenealıntı yaptı4 yıl önce
    Y al pie de una resquebrajadura enorme y suntuosa, como pórtico de vieja catedral, Demetrio Macías, con los ojos fijos para siempre, sigue apuntando con el cañón de su fusil…
  • Marlenealıntı yaptı4 yıl önce
    Nada importa saber adónde van y de dónde vienen; lo necesario es caminar, caminar siempre, no estacionarse jamás; ser dueños del valle, de las planicies, de la sierra y de todo lo que la vista abarca.
  • Marlenealıntı yaptı4 yıl önce
    Los soldados caminan por el abrupto peñascal contagiado de la alegría de la mañana. Nadie piensa en la artera bala que puede estarlo esperando más adelante.
  • Marlenealıntı yaptı4 yıl önce
    El aguacero se desató con estruendo y sacudió las blancas flores de San Juan, manojos de estrellas prendidos en los árboles, en las peñas, entre la maleza, en los pitahayos y en toda la serranía.
  • Marlenealıntı yaptı4 yıl önce
    Villa derrotado era un dios caído. Y los dioses caídos ni son dioses ni son nada.
  • Marlenealıntı yaptı4 yıl önce
    «por el triunfo de nuestra causa, que es el triunfo sublime de la justicia; porque pronto veamos realizados los ideales de redención de este nuestro pueblo sufrido y noble, y sean ahora los mismos hombres que han regado con su propia sangre la tierra los que cosechen los frutos que legítimamente les pertenecen».
  • Marlenealıntı yaptı4 yıl önce
    ¿Sería verdad lo que la prensa del gobierno y él mismo habían asegurado, que los llamados revolucionarios no eran sino bandidos agrupados ahora con un magnífico pretexto para saciar su sed de oro y de sangre?
fb2epub
Dosyalarınızı sürükleyin ve bırakın (bir kerede en fazla 5 tane)