un viudo ha de parecerse a un ataúd porque lleva algo muerto dentro y lo que llevas dentro acaba por afectar a tu aspecto exterior, de manera que los viudos son verdaderos estuches y eso es lo que los hace atractivos, a las viudas también, que tienen como un aire de recipiente en cuyo interior reposa, incorrupto, un recuerdo sin vida.