es
Kitaplar
Paula Bonet

La anguila

  • Abril Castilloalıntı yaptı4 yıl önce
    Pintando aprendí a mirar, entendí que la realidad es mucho más compleja de lo que parece, la pintura me ayudó a resolver lo que no se puede decir con palabras y es en la mancha donde consigo entender algo. Observo en ella la urgencia, la duda, la calma o la furia de aquel o aquella que la ha trazado. Analizo si hay control en la técnica o si aquello es cosa de una mano torpe que todavía ensaya el gesto. Advierto si quien mancha es complaciente consigo mismo y con el mercado o si es un suicida. Tiemblo con la belleza de un arrastrado o de una veladura magnífica, me olvido de que estoy viva, siento el placer que se siente al introducir el cuerpo frío en una bañera de agua templada.
  • Juan José Martín Andrésalıntı yaptı7 ay önce
    Tatiana Andrade se empieza a narrar así en su libro La vida láctea.
  • Juan José Martín Andrésalıntı yaptı7 ay önce
    Es difícil darse cuenta de que una está empezando una historia con un maltratador, el maltratador es un experto en crear espacios que la víctima cree que son seguros.
  • Juan José Martín Andrésalıntı yaptı7 ay önce
    También porque mi primer amante me doblaba la edad y como era tan buen orador –dentro y fuera del aula– supo comunicármelo con mucha eficacia a una edad temprana, pero me he tenido que enfrentar demasiadas veces a mí misma para saber algo del deseo del género al que pertenezco. Puta.
  • Juan José Martín Andrésalıntı yaptı7 ay önce
    Dacia Maraini habla de cómo nuestros cuerpos, derechos y maternidades son el campo de batalla donde el patriarcado despliega toda su artillería
  • Juan José Martín Andrésalıntı yaptı7 ay önce
    Mi piel tiene que ser suave en los brazos, en las ingles, en el pubis, en las rodillas y en los codos. Mi piel ha de ser siempre joven para ellos, porque si no se irán con una más joven. Intenta irte tú a tus cincuenta con uno de veinte. Depravada. Babosa. Asquerosa vieja de mierda.
  • Juan José Martín Andrésalıntı yaptı7 ay önce
    Adrienne Rich habla del cuerpo de la mujer como algo impuro y corrupto que amenaza a la masculinidad: algo que desea y es diabólico y sangra y se corre. Y lo enfrenta al cuerpo del único otro tipo de mujer que el patriarcado concibe: el de la pura, asexuada y sagrada. El de la virgen.
  • Juan José Martín Andrésalıntı yaptı7 ay önce
    No sabía que en el país al que huía se había derramado tanta sangre
  • Juan José Martín Andrésalıntı yaptı7 ay önce
    Pero –algunos, siempre algunos– no la quieren en un ejercicio de amor romántico, o de promesa de fidelidad, o de creación de brigada noble y afectiva, no. La quieren –algunos– para satisfacer sus ansias varoniles, para acrecentar su ego, para perpetuarse ellos mismos como depredadores –y qué masculina y qué bien suena la palabra en su boca, redonda, la palabra depredador en su boca después de un traguito de vino–, para olvidarse de la decrepitud a la que sus cuerpos no inmarcesibles empiezan a entregarse sin tener en cuenta lo que los cuerpos exultantes de vida de ellas desean.
  • Juan José Martín Andrésalıntı yaptı7 ay önce
    Ninguna frontera tienta más al contrabando que la de la edad
fb2epub
Dosyalarınızı sürükleyin ve bırakın (bir kerede en fazla 5 tane)